Resumen
Este artículo se propone examinar las principales fuentes de los prejuicios más extendidos sobre la adolescencia, que la caracterizan como una etapa necesariamente conflictiva, convulsa y destructiva. Para ello, se analiza la teoría de Granville Stanley Hall sobre la adolescencia, así como la interpretación de esta teoría por parte de Arnold Gessel. Tanto Hall como Gessel sustentan sus tesis en un determinismo biológico que parte del evolucionismo y de la ley de la recapitulación de Haeckel, que establece que la evolución ontogenética de cada uno es la plasmación de la evolución filogenética de la especie. Conforme a ello Hall define la adolescencia como la etapa equivalente a la etapa de la humanidad previa al establecimiento de la ley y el orden.