Resumen
Este libro no se ocupa de la vida y doctrina de Thibaut, sino de un hombre en el que “se aunaban dos pasiones: la justicia y la belleza” (p. 10). En estas dos pasiones encuentra Antonio Pau una ambivalencia fundamental, un “Romanticismo templado” (p. 10). Thibaut, que por cronología y por temperamento pertenece al Romanticismo temprano, “actuó guiado por dos faros del clasicismo: la razón, en el derecho – cuando lo que prevalecía entre los juristas era el sentimentalismo patriótico –; y el Renacimiento, en música – cuando lo que estaba de moda entre los compositores era un nuevo efectismo arrebatado.”