Resumen
Frente al modelo mecanicista tardío que considera al ser humano como un autómata rígido regido por un ordenador central (el cerebro), Kathinka Evers plantea un nuevo modelo, el del materialismo ilustrado, más integrador y holístico. Este modelo de materialismo ilustrado incluye una concepción de la conciencia como producto de la evolución; reconoce al cerebro como un órgano plástico, proyectivo y narrativo que actúa consciente e inconscientemente; acepta la importancia epistemológica de la información subjetiva y de la objetiva para la comprensión de la experiencia subjetiva; y considera la emoción como la marca distintiva de la conciencia.