Resumen
Si Max Weber fue quien planteó por primera vez los términos con los que entender la condición del ser humano en la Modernidad, será justo reconocerle su mérito cuando hayamos de presentar nuestras discrepancias en otros puntos. Que circunstancialmente el mundo se haya desencantado no implica necesariamente que su consecuencia sea el nihilismo. Karl Löwith, que no dejó de admirar a Weber, plantearía el problema en unos términos que hacen que las cosas y el ser humano sigan teniendo sentido.