Resumen
Persona (1966) es la película número vigesimoséptima de Ingmar Bergman. Con ella y Gritos y susurros
(1972), según el propio director, habría llegado al límite de sus posibilidades creativas. Lo que el director entiende aquí por llegar a su propio límite tiene también que ver con su propia concepción de la relación que se establece entre el arte y la vida. Recorriendo en sus memorias su producción artística, Bergman reconoce que, habiendo probado todos los medios de expresión artística, cualquiera de ellos se le aparecía como insuficiente, mientras que con Persona es capaz de mostrar aquello que sólo es mostrable a partir del medio cinematográfico.