Resumen
En mayo del 2005 un complejo arqueológico de 200 hectáreas situado a treinta y cinco kilómetros de la capital lituana, Vilnius, fue declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. El lugar fue descrito por el organismo internacional como “un testimonio excepcional de la evolución de las ocupaciones humanas en la región báltica durante 10.000 años”. El área, llamada Kernavė, es considerada el lugar donde se erguía una antigua capital de Lituania desaparecida en la Edad Media.2 Consta de cinco colinas, de las que una era la principal y las otras cuatro la rodeaban como unas fortalezas defensivas