Resumen
Este artículo pretende demostrar que las novelas Orgullo y prejuicio, de Jane Austen, y Tiempos difíciles, de Charles Dickens, presentan perspectivas muy diferentes en cuanto al rol y la naturaleza del poder en Inglaterra durante la primera mitad del siglo XIX. Al mismo tiempo, cada uno de estos dos libros retrata una sociedad en la que prevalece la base económica del poder. Ambos trabajos se pueden ver como críticas sociales, aunque Dickens se centra en asuntos públicos (educación, mundo laboral, economía capitalista, etc.), mientras que Austen está mucho más enfrascada en la esfera privada (amor, matrimonio, etc.). De este modo, este artículo utiliza procedimientos estadísticos y de análisis (estadística inferencial) para apoyar el argumento de manera más elaborada y sobre una base sólida.